La comarca celebró ayer el acto central con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, organizado por el Consejo Comarcal en la sala de actos de la Agrupación Binéfar 77.
La convocatoria reunió a ayuntamientos, entidades sociales, profesionales y ciudadanía en un encuentro que puso el foco en reforzar la prevención, la atención integral y la respuesta pública ante la violencia machista, una realidad que sigue golpeando a miles de mujeres en España y también en el medio rural.
Durante la jornada se compartieron datos que permiten dimensionar el impacto en el territorio: los Servicios Sociales de la Comarca han atendido 33 casos de mujeres víctimas este año, además de 47 partes policiales por agresiones o quebrantamientos de órdenes de alejamiento y 6 agresiones sexuales registradas. A nivel estatal, la presidenta del Consejo Comarcal, Tania Solans, recordó que en 2025 y hasta el momento, 38 mujeres han sido asesinadas en España, dejando detrás familias y municipios marcados por la violencia. “Estas mujeres no son cifras ni estadísticas: son vidas arrebatadas, historias truncadas y proyectos que no volverán”, señaló en su intervención.
El acto, concebido “desde el territorio y para el territorio”, puso en valor la participación institucional y comunitaria. El consejero de Servicios Sociales e Igualdad, Iván Holgado, destacó la importancia de que ninguna mujer afronte sola el proceso de pedir ayuda: “Existe una red pública, profesional y humana dispuesta a acompañar, proteger y actuar con rapidez”.
Uno de los momentos centrales fue la lectura coral del Manifiesto Comarcal del 25 de noviembre, a cargo de Eva Paricio, Judit Ballarín, Ana Gascón, Paco Paricio, Berta Aguilar, Fadiala Fofana, Pilar Casado y Carmen Lumbierres. El manifiesto puso el foco en las barreras que afrontan muchas mujeres en el medio rural (el silencio, las distancias, la dispersión geográfica, la presión social o la falta de recursos) y, al mismo tiempo, reivindicó la fortaleza de los pueblos de La Litera, donde la solidaridad, el apoyo vecinal y la memoria compartida construyen una red esencial de protección y acompañamiento.
A continuación, Laura Escuder, psicóloga de los Servicios Sociales comarcales, leyó la carta elaborada por el grupo terapéutico de mujeres víctimas, un mensaje cargado de emoción que recordó el impacto profundo de la violencia en la vida de las mujeres y sus familias.
El acto concluyó con la acción simbólica del Árbol de la Igualdad, en la que representantes institucionales, entidades sociales, asociaciones de mujeres y ciudadanía depositaron mensajes de apoyo y esperanza. La fotografía final reflejó la unión de un territorio decidido a combatir la violencia machista desde todos los ámbitos.
La Comarca de La Litera reafirma así su compromiso de proteger y acompañar a las víctimas, fortalecer la prevención y la educación en igualdad y reforzar la red pública de atención, avanzando hacia un territorio donde ninguna mujer viva con miedo.